sábado, 24 de julio de 2010

A positivar


Ya está. Terminanos de filmar las diez escenas de que consta nuestro corto. Pero no vamos a descansar, ni mucho menos. Nos queda terminar de componer la música, las atmósferas, o el audio que necesitemos para Loma Saso. Esta semana, puede que ya vayamos al estudio, a grabar cosas, que ya están cocinándose en el horno.

La postproducción, y el montaje, se hará a lo largo del mes de agosto. No tenemos prisa en estrenarlo, así que haremos las cosas bien, con mesura.

Tengo que agradecer la entrega de los actores, volcando lo mejor en sus personajes. El talento, y el trabajo de David, Rubén, Mónica, y Laura, del equipo técnico. La presencia, las fotos, y los consejos de Carlos Miglaccio. El apoyo del Ayuntamiento de Tierz, con Jesús Alfaro al frente, las atenciones de Asun, la encargada del bar, que nos ha atentido siempre casi como una madre, a los escritores Víctor Pardo, y Salvador Trallero, por su información, su amabilidad, y su talento, mostrado en sus libros, a la gente del grupo de Recreación "Memoria de España", por su disponibilidad, bondad, y sentido del humor, y todos los apoyos institucionales que hemos tenido, para sacar adelante esta idea.

No, no ha sido fácil, pero han sido unos días memorables, de los que profundamente, te humanizan, al ponerte en la piel de aquellos hombres y mujeres, que defendieron un ideal de hermandad, justicia, e igualdad.

Como no me gusta sonar pedante, lo dejo aquí. Este es un tema, que se explica con imágenes, y sentimientos. No sólo con palabras.

lunes, 19 de julio de 2010

Un corto, de película


Por segundo fin de semana consecutivo, hemos ido a las trincheras de Tierz, a filmar unas cuantas escenas más de Loma Saso, el corto en el que todo el equipo de actores, y técnicos, estamos trabajando durante este mes de Julio.

"La calor", es intensa, pero la luz en las trincheras, es cálida, mágica, y le da a todo el empaque visual, un tono, parecido al Western, un Western Republicano, por supuesto.

El sábado, hicimos una escena en la que algunos milicianos, nuevos, y veteranos, compartían el vino, y un plato de migas. Una escena costumbrista, en la que todos los personajes, no importara de dónde vinieran, compartían ese momento de camaradería, entre incidencia, e incidencia en el frente.

El domingo, un duelo entre joteros. El pundonor herido, de unos y otros, que no podía terminar bien. Nos costó hacerla, porque era muy compleja, pero la sacamos adelante. Se nos unió gente del grupo de Recreación Histórica "Memoria de España", y Silvia, enfermera, de Tierz, que defendió su papel de enfermera miliciana, con ternura, y arrojo.

Intentamos hacer una escena nocturna, pero se nos echó encima la noche, y lo hemos dejado para esta semana. En algún momento, sentí que estábamos atravesando la bruma de la historia. Algo mágico, sí, sucede allá arriba. Lo dice el viento, el viento, que recuerda los nombres de todos los que combatieron allá arriba, en esa loma.