viernes, 10 de abril de 2009

Si el tiempo y la autoridad...

Años intermitentes. Este montaje sobre La Semana Santa Oscense lo realizé en el 2006 con una pequeña cámara digital Kodak C330, de 4 megas. El texto, lo saqué de la tarjeta que entregaban en la iglesia de Santo Domingo, al hacer un donativo, el sábado, durante la guardia del Cristo Yacente.

No soy, ni por asomo, dado a estas ceremonias. Ese año, disponer de las posibilidades de la edición digital, me permitió plantearme este reto. Lo subí a mi primer blog, allá por el 2006. Sólo el año pasado, pudo volver a salir la Procesión del Viernes Santo. Éste, el cielo está demasiado cargado de nubes, y la metereología no va a compañar, me temo. Lástima por la nueva Cofradía del Cristo de los Gitanos.

Expuse mi versión de nuevo creyente, cual Bob Dylan reconvertido al Cristianismo. Tiene su valor documental, visto lo visto, aunque hoy por hoy, al disponer de más técnica, y más posibilidades, lo hubiera hecho de otro modo, lo hubiera enfocado más hacia otros conceptos menos testimoniales, y locales, aunque como digo siempre, algo, quedó.

Este blog lo seguís mucha gente "de fuera", así que os cuelgo de nuevo el montaje para que conozcáis un poco la ciudad, el entorno por dónde transcurre la procesión, y nuestros pequeños tesoros, que algunos, parece, están dispuestos a no devolvernos.


jueves, 9 de abril de 2009

La historia de las cosas

Recomendado por mi amigo "Spiritwind", (Manolo, el Gaditano).

Ayer vi "A Ciegas", la última película de Fernando Meirelles, director entre otras de "Ciudad de Dios", y "El Jardinero Fiel". Prima hermana de "Hijos de los hombres", y una más que buena adaptación de "Ensayo sobre la ceguera" de José Saramago.

Cine apocalíptico, o cine social. El apocalipsis sólo vive, en nuestro interior. Nosotros somos nuestros propios zombies, los que traemos el caos, los que creamos el miedo. Dos horas, que se me pasaron en un suspiro.

Hoy, Jueves Santo. Desfile de "Señoronas, y Señorones" por las iglesias de la ciudad. Clasismo, horas de peluquería, cierta prepotencia... ¿Quiénes son, hoy por hoy, los fariseos de nuestros días?

Creo que todo, es mucho más sencillo. Afortunadamente, había madres, y padres, que jugaban con sus hijos, en La Plaza de Navarra, ajenos a todo esto.

martes, 7 de abril de 2009

El doceavo mandamiento

Debería decir: "Lo que viene del tiempo, al tiempo, debe volver".

No debemos afilar tanto los lápices. Al final, de tanto sacarles punta, acabaremos usándolos como saetas de ballesta.

En España, parafraseando a Larra: "Ni los sastres son caballeros, ni los caballeros, son sastres".

C´est drôle, C´est drôle...


lunes, 6 de abril de 2009

Analog Power

Retrosund es un "friki" alemán del sonido analógico. En su canal de Youtube podéis encontrar decenas de demos de sintetizadores analógicos de casi todas las épocas, (años 70 y 80, principalmente).




Os dejo una demo del Jupiter 4 de Roland, sinte aparecido a finales de los años 70. Recuerdo haber leído una review en "Popular Uno", revista que junto al Vibraciones, solía comprar todos los meses, a principios de los ochenta. En ese apartado dirigido a los sintes, escribían músicos como Michel Huygen, de Neuronium, entre reputados sintesistas, y teclistas Españoles.

Y ahora, me apetece hablar de estos cacharretes, y su relación con nuestra ciudad.

El primer sintetizador que creo, apareció por Huesca, fue un Korg Ms 10, propiedad del teclista de Acoustic, Baltasar Monsón, coautor junto a su hermano de los dos Himnos de la Sociedad deportiva Huesca. Era un sinte con un solo oscilador, y no demasiadas posibilidades, pero si lo combinabas con otros teclados propios de la época, (Cuerdas Solina, Logan, Elka, o Crumar), órganos Hammond, o Pianos Fender Rhodes, era efectivo.

El primer sinte que pude comprar, fue el modelo superior a este, el Ms 20, comprado al teclista de la NCB, (Tolo y Luis Margalejo, cantante de Manacor salieron de allí), que más tarde fue uno de los socios fundadores de Rampa. Mi equipo verbenero durante los primeros ochenta constaba de ese MS 20, un teclado de cuerdas Logan, un piano Rhodes, un órgano Roland, y por último un Roland SH 101, comprado en el verano del 83. Este modelo llevaba arpegiador, secuenciador, y ya podía colgarse, con lo que podía salir de mi rincón, y tocar con él "Boda en Londres", de Mecano, y alguna que otra canción de Miguel Ríos.

Pero todo aquel sistema analógico tenía que evolucionar, y apareció el MIDI, y con él, Huesca se llenó de sintes digitales, módulos de sonido, cajas de ritmo, Samplers... El primero en aparecer, el mío, un Akai X7000, con 384 k´as de memoria, y 12 bit´s de muestreo. Después, llegaron el Fz de Javierre, con dos megas de ram, y 16 bit´s de muestreo, (un cambio, la verdad, pero mucho más complicado de controlar), algún JX8P, dos DX-7, un D-50, propiedad de uno de los teclistas de Cículo de Viena..., y un Poly 800, que daba muchísimo juego, sin contar un Juno 106, propiedad del teclas de Manacor.

A Pardo, le costó sacarse de la tienda su Polysix. Mariano Ferrández, teclista de la Orquesta Borrasca, se compró otro también. Era un aparato delicioso, pero, no tenía Midi, ni el teclado era sensitivo. Una vez, grabé una maqueta, sincronizándolo con una caja de ritmos midi, (una Alesis), através de los convertidores CV del MS 20. El resultado era espectacular, pero había que saber álgebra para que aquello funcionara.

Muchos de estos sintes, están en el Canal del amigo Retrosound.

Con la llegada de los Vsti´s, toda esta fiebre por lo analógico parece que ha desaparecido. Conseguir uno de estos modelos resulta muy caro, (encontré a un friki americano que había conseguido comprar un Poly Moog de Depeche Mode, o Gary Numan, creo, pero podía repararlo, aunque al tío, le daba igual). No suena igual mi abuelete M1, que cualquier vst, por muy bien emulado que esté, (el Ms 20 emulado de Korg ni por asomo suena como el modelo Hard).

Ya no puedo ir a local alguno, a meter horas jugando con mis sintes. No quedan, ni esos locales, ni mis viejos cacharretes. Tampoco podría permitirme comprar los nuevos modelos tipo Moog, pero quién sabe. Los cambios son necesarios, aunque sólo sirvan para valorar lo que tuvimos un día. Y quien habla de locales, y sintes, habla también de calles, y de personas.

El año pasado, mientras hacía tiempo para ir al dentista, compré un ejemplar de Rock, una revista musical. Dentro, había artículos reciclados de esa Vibraciones de los años 80, en especial, un artículo sobre Camel. El mismo reportaje, servido, y vendido, 28 años después.